El problema del 80%: aprovechamiento de los datos para alcanzar la equidad en los servicios de atención a la salud

Nasim Afsar, MD, MBA, MHM, Senior Vice President y Chief Health Officer, Oracle Health | 1 de junio de 2023

Los productos mostrados son ejemplos de lo que se ha proporcionado en casos específicos. Cada producto o dispositivo médico está diseñado para cumplir con las normativas de la geografía donde se utiliza. Sin embargo, no podemos garantizar su disponibilidad o cumplimiento en otras regiones específicas. Las adaptaciones locales pueden ser necesarias para satisfacer los requisitos regionales.

Más del 80% de nuestra salud depende de los determinantes sociales de salud, como el lugar donde se vive y trabaja, el aire que se respira, los medios de transporte, el agua que se bebe y el consumo de tabaco u otras drogas. Estos factores también pueden influir, y de hecho influyen, en el acceso a la atención a la salud, a los recursos esenciales y a las oportunidades de bienestar.

Las poblaciones desfavorecidas y desatendidas no tienen el mismo acceso ni las mismas oportunidades que el resto de la sociedad, y estas desigualdades se hacen realmente patentes con la existencia de unas peores condiciones de salud y unas mayores tasas de mortalidad. No obstante, todo el mundo siente los efectos de la falta de salud en estas comunidades y del aumento de los costes de la atención a la salud.

La desigualdad en materia de salud está arraigada de una manera sistémica en el sector de la atención a la salud a nivel mundial. La diferencia de esperanza de vida entre los países de ingresos bajos y altos puede llegar a ser de hasta 18 años. Las desigualdades suponen más de 320.000 millones de dólares de gasto anual de atención a la salud solo en EE.UU., y se prevé que esta cifra aumente hasta 1 billón de dólares en 2040. Este modelo se repite en muchos países del mundo, lo cual supone un desbordamiento para el sistema y no resulta sostenible.

Del mismo modo que la tecnología nos ha ayudado a mejorar tantos otros aspectos de nuestras vidas, también podría ayudarnos a alcanzar la equidad en el sector de la salud eliminando las barreras en el uso de herramientas, recursos, conocimientos y oportunidades, elementos indispensables para gozar de la mejor salud posible.

Los datos constituyen realmente la base para la mejora de la equidad en términos de salud. Las personas, ya sean pacientes, médicos, líderes comunitarios o funcionarios de la atención a la salud pública, necesitan datos limpios, utilizables y fiables para poder tomar decisiones esenciales. Para impulsar la equidad en términos de salud, es necesario que comprendamos los determinantes sociales de la salud junto con la información procedente de los datos sobre reembolsos y reclamaciones de salud, investigación, operaciones y riesgos presentes en la comunidad. El entorno físico del paciente, los comportamientos relacionados con la salud y los factores económicos marcan una profunda diferencia.

La combinación de todos estos datos de forma significativa puede convertirse realmente en algo transformador. Aunque los datos clínicos fluyen en los intercambios de información, la mayoría de los datos que afectan a la salud de una persona están aislados y desconectados, almacenados fuera del sistema de la historia clínica electrónica del hospital. Por este motivo, se está creando una plataforma de atención a la salud abierta, inteligente y basada en la nube, que permite a los pacientes decidir si conectan los sistemas clínicos y empresariales de las organizaciones, permitiéndoles la inclusión de datos como los determinantes sociales de salud o los factores de riesgo que afectan a la comunidad. Estamos eliminando la compartimentación de datos y conectando distintos sistemas.

Del mismo modo que la tecnología nos ha ayudado a mejorar tantos otros aspectos de nuestras vidas, también podría ayudarnos a alcanzar la equidad en el sector de la salud eliminando las barreras en el uso de herramientas, recursos, conocimientos y oportunidades, elementos indispensables para gozar de la mejor salud posible.

A nivel individual, la tecnología puede ofrecer a los profesionales asistenciales una visión completa e integral de la salud de un paciente a través de una única historia clínica longitudinal. Esto les permitiría abordar todos los aspectos del estado de un paciente, incluidos los factores no clínicos. A nivel comunitario, y con el consentimiento de la comunidad, la tecnología ayuda a nuestros líderes a obtener una visión completa sobre la salud y los riesgos de la comunidad. Disponiendo de una mejor información, se puede llegar y tratar más eficazmente a los distintos segmentos de la población, redirigir los recursos, la programación y las intervenciones de una forma equitativa, además de crear políticas que favorezcan la justicia en materia de salud.

Con una plataforma de salud basada en la nube, también es posible extender los datos anonimizados y agregados a todo el ecosistema de atención a la salud, poniéndolos a disposición de investigadores y científicos. Impulsar la equidad en materia de salud supone garantizar que todo el mundo tenga acceso a las terapias disponibles más recientes e innovadoras. La tecnología permite a las empresas del sector conectar con los profesionales asistenciales, con el personal clínico, los pacientes y las comunidades para ampliar el acceso a los ensayos clínicos. El resultado es una mayor diversidad de participantes en los estudios, lo que permite a los investigadores disponer de información más representativa, completa y exhaustiva sobre los pacientes para poder validar la seguridad y eficacia de los tratamientos.

Más de 100 organizaciones de prestación de servicios de atención a la salud que forman parte de la red Learning Health Network de Oracle Health se dedican a compartir datos anonimizados para impulsar la investigación clínica. Con más de 100 millones de pacientes representados, la diversidad se ha convertido en el gran superpoder de la red asistencial. Los ensayos clínicos realizados a través de la red Learning Health Network triplican la media de participantes negros e hispanos de Estados Unidos. Las personas, los médicos y las comunidades que nunca han tenido la oportunidad de participar en descubrimientos clínicos ahora ya pueden hacerlo accediendo a terapias, diagnósticos y medicamentos de vanguardia.

En resumen, con más datos y mejor información, se nos presenta una increíble oportunidad para crear un mejor sistema de salud que mejore la vida y la experiencia de los pacientes, los médicos y las comunidades de todo el mundo, independientemente de su situación económica o geográfica. Pero para lograrlo, tendremos que trabajar todos juntos. Y el momento de actuar es ahora.