Margaret Lindquist | Estratega de contenidos | 4 de diciembre de 2023
Los esfuerzos de los fabricantes por optimizar sus cadenas de suministro, es decir, maximizar su eficiencia, afectan a todas sus fases, comenzando por el diseño del producto y el abastecimiento de materias primas y componentes a lo largo del proceso de producción, el almacenamiento y la posterior distribución.
A finales de 2022, el 60 % de los participantes en la encuesta global sobre cadena de suministro elaborada por KPMG afirmó que entre sus planes se encontraba invertir en tecnología digital para reforzar los procesos de su cadena de suministro y las capacidades de integración y análisis de datos relacionadas. Esta cifra supone un cambio para muchas organizaciones, que anteriormente centraban su inversión tecnológica en sistemas de gestión interna y orientados al cliente. En respuesta, algunos de los principales proveedores de tecnología de gestión de la cadena de suministro (SCM) están integrando capacidades como la IA, sensores del Internet de las cosas (IoT) y análisis predictivo en sus plataformas de SCM, con el objetivo final de proporcionar una experiencia perfecta para los fabricantes y sus proveedores, almacenes, distribución y socios del sector retail.
La optimización de la cadena de suministro abarca todas las actividades que un fabricante realiza para mejorar la eficiencia y la rentabilidad de su cadena de suministro, por ejemplo, la reducción del desperdicio de materiales, la obtención de una perspectiva más clara de los riesgos normativos, el desarrollo de estrategias de copia de seguridad para problemas inesperados de abastecimiento de piezas y la mejora de la velocidad y la precisión de la entrega de productos. Básicamente, la optimización de la cadena de suministro tiene el objetivo de maximizar los beneficios y minimizar los costos.
Los fabricantes que destacan en la optimización de sus cadenas de suministro supervisan constantemente su rendimiento utilizando indicadores clave de rendimiento (KPI), como la ejecución puntual de pedidos, las tasas de devolución de productos y las tasas de pedidos perfectos, y ajustan o revisan aquellos aspectos que aumentan los costos innecesariamente o ralentizan la producción y entrega. Por ejemplo, algunos fabricantes utilizan software de gestión del transporte para mejorar la visibilidad de los envíos de productos, acortar los tiempos de envío y aumentar la satisfacción del cliente. Otros utilizan la IA para detectar anomalías causadas por errores humanos o fallos en la maquinaria y perfeccionar sus procesos en función de ese feedback.
Los fabricantes deben afrontar desafíos de la cadena de suministro como la inestabilidad geopolítica, conflictos comerciales bilaterales, la congestión portuaria, huelgas laborales y escasez de trabajadores, que retrasan la salida de envíos de mercancías todo el mundo. En respuesta, los responsables de la cadena de suministro utilizan blockchain y sensores del IoT para rastrear los artículos desde cualquier lugar del mundo, mientras que los responsables del transporte utilizan el aprendizaje automático para identificar los mejores transportistas y rutas y anticipar posibles retrasos.
Conclusiones clave
Para muchas empresas, la optimización de la cadena de suministro es una constante que siempre está ahí en segundo plano, dado que las diferentes personas que gestionan cada una de las partes de la cadena de suministro trabajan para lograr que sus áreas sean más eficientes y rentables. Para decidirse a priorizar la optimización de la cadena de suministro, a veces se necesita un gran evento, por ejemplo, una adquisición, una recesión financiera, una huelga o una pandemia.
Cuando sucede algo así, las empresas deben redoblar sus esfuerzos dando máxima prioridad a la optimización de la cadena de suministro: visibilidad integral que abarca el diseño de conceptos de productos, el abastecimiento de materias primas, la fabricación de productos y su distribución a minoristas o directamente a clientes. El primer paso es un análisis exhaustivo de todos los elementos de la cadena de suministro actual, seguido por el desarrollo o ajuste de planes de producción e inventario que se ajusten a las previsiones de demanda. La fase final se centra en la ejecución, durante la cual, los responsables de TI y cadena de suministro eligen sistemas para la gestión de inventarios, almacenes y transportes, análisis y apoyo a la toma de decisiones. Pero la optimización va más allá. Los responsables deben evaluar constantemente el funcionamiento de sus cadenas de suministro y estar al día de las nuevas tecnologías y procesos que mejoren constantemente sus operaciones.
Por ejemplo, durante la pandemia, una cadena global de restaurantes utilizó capacidades de análisis predictivo integradas en su software de planificación para anticipar con precisión la escasez de ingredientes. Utilizó software de gestión del rendimiento empresarial para identificar discrepancias en la facturación de proveedores y recuperarse del exceso de gasto, ahorrando millones de dólares al año. Otra empresa, una mayorista de café con sede en Europa con un historial de crecimiento basado en adquisiciones, tuvo que enfrentar enormes desafíos en torno a la consolidación financiera y de la cadena de suministro. Para solucionarlos, la organización recurrió a una suite de aplicaciones basada en la nube que integraba las áreas de finanzas, cadena de suministro, compras, fabricación y gestión del rendimiento, y permitía que las empresas adquiridas se agregaran a la suite con relativa facilidad.
La optimización de la cadena de suministro es importante porque garantiza la máxima (o casi la máxima) eficiencia y ayuda a los fabricantes a cumplir e incluso superar las expectativas de los clientes. Los fabricantes que no se mantengan al día se enfrentan a múltiples riesgos, como mayores costos relacionados con los desechos, una logística inadecuada y una escasa visibilidad del inventario. Pero existen otros riesgos, como la incapacidad de responder rápidamente a las interrupciones de la cadena de suministro, ciclos de producción más largos de lo necesario, retrasos en la entrega de productos y un servicio al cliente de escasa calidad.
Según una encuesta de KPMG realizada a finales de 2022, el 67 % de las organizaciones afirmó que el cumplimiento de las expectativas de entrega rápida de los clientes es una de sus principales prioridades de cara a los próximos 12 a 18 meses. Los investigadores de KPMG concluyeron que los fabricantes priorizarán las inversiones en la cadena de suministro que automaticen las tareas rutinarias y les brinden mejor visibilidad por medio de capacidades analíticas mejoradas. Desarrollar una estrategia sólida de optimización de la cadena de suministro es esencial tanto para reducir los riesgos operativos como para aprovechar las oportunidades de crecimiento.
Los fabricantes que optimizan sus cadenas de suministro obtienen múltiples beneficios, como menores costos, mayores beneficios, reducción de riesgos, mejor calidad del producto y clientes más satisfechos. Aquí te mostramos cómo.
El ecosistema de la cadena de suministro incluye a todas las partes involucradas en el diseño, fabricación, almacenamiento y movimiento de productos y sus componentes desde el primer momento hasta el cliente final. El primer paso para mejorar ese ecosistema es completar una auditoría paso a paso de cada fase y socio, incluidos los proveedores, para identificar dónde se puede aumentar la eficiencia del proceso y reducir los costos, así como realizar el seguimiento de las prácticas medioambientales y laborales de los socios de cara al cumplimiento de las regulaciones y a operar de manera responsable y ética. Después de realizar una auditoría, es posible que necesites deshacerte de algunos proveedores e incorporar otros. Una auditoría exhaustiva servirá para comprobar el valor de cada proveedor y te permitirá ver con claridad si resulta sencillo incorporar otros proveedores para cubrir cualquier deficiencia que pueda aparecer.
La eficiencia de la cadena de suministro tiene un impacto directo en la calidad del producto desde el inicio del proceso de producción, cuando se adquieren las materias primas, hasta la entrega del producto. Los gerentes de la cadena de suministro pueden optimizar su cadena de suministro para cumplir con los estándares de calidad en cada fase.
Por ejemplo, los gerentes de calidad pueden utilizar especificaciones creadas al principio del diseño del producto para desarrollar planes de inspección para las fases críticas del proceso de fabricación e identificar así defectos en las materias primas o piezas dañadas. Los datos recopilados se pueden utilizar para desarrollar planes de acción correctiva, que en el caso de defectos de materias primas pueden implicar revisar las especificaciones iniciales, determinar si el proveedor puede proporcionar materiales que cumplan dichas especificaciones y comprobar una muestra.
El software de gestión de calidad puede unificar los sistemas de calidad desconectados, comunes entre los grandes fabricantes, y brindar a los responsables de calidad la flexibilidad necesaria para que puedan adaptarse a programas de producción más cortos. Para que un sistema de control de calidad resulte eficaz, deberá ser capaz de adaptarse a cambios repentinos y mejorar a medida que recopile más datos.
Una de las mayores oportunidades de reducción de costos que brinda la optimización de la cadena de suministro viene propiciada por la precisión en el control del inventario, que incluye la previsión de la demanda, el seguimiento de las existencias y el almacenamiento de productos. Aquí el objetivo consiste en evitar, por un lado, la producción excesiva de artículos que se acumulen indefinidamente en los almacenes, necesiten descuentos o, peor aún, se desperdicien y, por otro lado, la escasez de producción, que podría provocar que los clientes no obtengan los productos que desean en el momento oportuno.
La optimización de los procesos de almacenamiento, producción y logística puede abaratar los costos de infraestructura, en algunos casos reduciendo la cantidad de espacio necesario para producir el mismo número de productos o permitiendo a los fabricantes aumentar las tasas de producción. La automatización de procesos rutinarios, como el procesamiento de órdenes, la gestión de inventario y la manipulación de cargas, puede reducir los costos de mano de obra y mejorar la eficiencia de los procesos. Por ejemplo, un software que procesa automáticamente los pedidos y realiza un seguimiento del inventario puede minimizar los errores humanos, mientras que los transportistas autónomos que trasladan piezas o productos terminados a su destino final dentro de una fábrica pueden reducir los costos de mano de obra y mejorar la seguridad.
Existen muchos lugares a lo largo de la cadena de suministro donde los fabricantes pueden aumentar la eficiencia y reducir los costos y, por lo tanto, impulsar el crecimiento de sus beneficios. Frost & Sullivan afirma que las estimaciones apuntan a que los fabricantes sobreproducen un 20 % a causa de la volatilidad del mercado y las fluctuaciones de la demanda. En respuesta, los fabricantes expertos recurren a aplicaciones de SCM y analítica de datos para identificar formas de perfeccionar sus procesos de planificación, reducir los costos de retención de inventario e implementar procesos de satisfacción del cliente con mayor capacidad de respuesta. Por ejemplo, los fabricantes pueden modificar los procesos de satisfacción del cliente ofreciendo productos escasos y de alta demanda a empresas de retail de alto valor con un sólido historial de ventas, de modo que puedan incrementar sus ingresos.
"No se puede mejorar lo que no se mide": un dicho de sobra conocido que es aplicable tanto a la mejora del rendimiento del proveedor como a casi cualquier otra cosa. Esa medición empieza por evaluar a los proveedores en función de KPI establecidos, como el periodo medio de pago de los materiales de producción, la entrega a tiempo de los proveedores y las tasas de defectos de los materiales. Posteriormente, resulta preciso trabajar con cada proveedor para averiguar cómo mejorar su desempeño en las áreas en las que no cumpla las expectativas. Por ejemplo, el KPI del periodo medio de pago de los materiales de producción mide el tiempo que transcurre entre la recepción de los materiales y el momento en que se hace efectivo el pago pertinente, de modo que puedas priorizar los proveedores que ofrezcan mejores condiciones de facturación.
Cuando los datos financieros están aislados de los de logística, que a su vez lo están de los de inventario, es decir, cuando cada grupo de datos se encuentra disperso en su propio silo, resulta imposible lograr una visión integral de toda la cadena de suministro. La mejor solución pasa por contar con una tecnología integrada que proporcione seguimiento inmediato del inventario, previsión de ventas, gestión de flujo de caja, logística de entrega y comportamiento del cliente. Esta visibilidad integral es fundamental para cualquier empresa que desee optimizar su cadena de suministro.
El departamento de ventas maneja cifras que el equipo de marketing necesita para entender qué productos generan más ingresos. Los equipos de ventas necesitan saber qué productos están disponibles para no comprometer en exceso a los distribuidores y los clientes. El área de producción necesita acceder a las previsiones de ventas para comprender mejor qué productos debe priorizar.
Por ejemplo, los responsables de compras de un fabricante generalmente buscan las materias primas de menor costo. Sin embargo, con acceso a los datos de ventas, pueden tomar una decisión diferente si creen que los materiales de menor costo pueden agregar tiempo al ciclo de producción de un artículo demandado debido a problemas con la entrega o la calidad.
El éxito de las técnicas de optimización de la cadena de suministro pasa por crear un plan detallado de varias fases. La fase de diseño determina dónde se deberían localizar las ubicaciones físicas, como fábricas, almacenes y centros de distribución. En la fase de planificación, los responsables desarrollan planes de producción que tienen en cuenta los costos de almacenamiento de productos y las fluctuaciones en la disponibilidad del transporte, de cara a garantizar que se produzcan los productos adecuados en el momento preciso. En la fase de ejecución, los responsables alinean la gestión de órdenes, la gestión de almacenes e inventarios y la logística para garantizar que los productos lleguen a los retailers o clientes de la forma más rápida y confiable, y al menor costo posible.
La optimización de costos consiste en perfeccionar las previsiones para producir suficiente suministro a fin de satisfacer la demanda —lo que se denomina fabricación justo a tiempo— sin perder ventas ni pedidos comprometidos. Otras técnicas también propician ahorros de costos, como la automatización de la fábrica, la reducción de la cantidad de residuos en el proceso de fabricación (especialmente relevante para productos perecederos), la elección de proveedores de menor costo, el corte del consumo de energía, la aplicación de mantenimiento predictivo (mantenimiento de máquinas antes de que se descompongan) y la optimización de las rutas de transporte.
La optimización del inventario implica la fabricación de la cantidad exacta de productos necesarios para satisfacer la demanda. Mantener un exceso de inventario aumenta los costos de almacenamiento y puede generar residuos. Por el contrario, mantener un volumen demasiado escaso de inventario puede implicar un mayor tiempo de espera por parte de los clientes, lo cual, posiblemente provoque que acudan a un fabricante distinto. La mejor manera de comenzar el proceso de optimización es determinar por qué se mantienen ciertos niveles de inventario y racionalizar ese inventario para satisfacer la demanda, minimizando los costos de logística y almacenamiento.
Los responsables de la cadena de suministro deben identificar las mejores ubicaciones para fábricas, almacenes y centros de distribución, y crear los flujos óptimos entre esas ubicaciones. El objetivo es controlar los costos y aumentar la confiabilidad, así como proporcionar flexibilidad en caso de interrupciones en la cadena de suministro. Los responsables deben comenzar evaluando a cada proveedor, y a los proveedores de sus proveedores, incluida su capacidad para adaptarse a las fluctuaciones en la oferta y la demanda.
Además de los propios proveedores y productos, los componentes básicos de la mayoría de las cadenas de suministro son los distribuidores, los proveedores de servicios de logística, los propietarios y los clientes finales. Aunque se pueden optimizar todos los elementos de la cadena de suministro, el fabricante tiene más control sobre unas áreas que otras. Los avances tecnológicos están permitiendo que los fabricantes vayan más allá de la simple optimización de sus propias instalaciones, procesos, productos y logística. También conectan a los fabricantes con los proveedores, así como con datos de terceros que pueden advertir sobre cierres de puertos, fenómenos meteorológicos, huelgas inminentes y otros factores que podrían perjudicar a las entregas.
Es un error pensar que la gestión de proveedores tiene más que ver con las relaciones interpersonales y unas sólidas competencias de comunicación que con la tecnología de la cadena de suministro. Aunque estas cualidades son importantes, para mantener relaciones sólidas en la cadena de suministro resulta fundamental disponer de datos de calidad y oportunos. Los fabricantes deben entender qué proveedores están funcionando bien y cuáles no pueden satisfacer las demandas y por qué motivo. Necesitan conocer en tiempo real la demanda de sus propios clientes para poder comunicar rápidamente los cambios a los proveedores. Y en un momento en que resulta vital para los fabricantes entender con claridad el impacto ambiental y social de sus elecciones en materia de proveedores y productos, deben priorizar a las empresas que también conozcan de manera exhaustiva las acciones de sus propios proveedores. Asimismo, es importante disponer de varios proveedores en diferentes ubicaciones geográficas para que los fabricantes puedan cambiar rápidamente de uno a otro. La dependencia de un único proveedor para un componente crítico o materia prima puede hacer que la producción se detenga.
Los proveedores que no son de confianza, aquellos que entregan pedidos con retraso, escasos o remiten materiales equivocados, dificultan que los fabricantes mantengan un volumen adecuado de inventario; ni excesivo ni insuficiente. Algunas empresas imponen sanciones a los proveedores que no cumplen sus compromisos, por ejemplo, reduciendo los periodos de gracia en caso de retrasos en las entregas antes de que se apliquen comisiones. Pero las empresas también deben recompensar a los proveedores que cumplen sus compromisos, por ejemplo con bonos. Los fabricantes también necesitan controlar de cerca a los proveedores para asegurarse de que se ajustan a sus estándares de prácticas de suministro ético.
Los fabricantes pueden ahorrar dinero minimizando los costos operativos de la cadena de suministro, por ejemplo, mediante la automatización de tareas rutinarias como los pedidos y la facturación para reducir el número de empleados, la optimización de las rutas de entrega para ahorrar en los costos de transporte por carretera y la elección de medios más eficientes desde el punto de vista energético para calentar y refrigerar edificios. Pero el costo de producción suele ser el factor más importante, por lo que negociar y renegociar con proveedores directos es el primer paso para encontrar ese equilibrio entre alta calidad y asequibilidad.
La red de transporte de un fabricante trae suministros, transporta bienes entre fábricas, almacenes y otras instalaciones, y envía productos terminados a distribuidores, retailers y clientes finales. Minimizar los costos de transporte es una tarea fundamental, sobre todo considerando que los clientes esperan envíos gratuitos o baratos y una entrega rápida. No cumplir con esas demandas puede hacer que los clientes se vayan con su negocio a otra parte.
El software de gestión de transporte y comercio global ayuda a los fabricantes a planificar el movimiento de materias primas y productos terminados y recomienda el método más rentable y que mejor cumpla las normativas. Aunque los responsables de transporte han estado utilizando este software durante muchos años, los avances en aprendizaje automático, trazabilidad del IoT, la informática en la nube y otras tecnologías están convirtiendo en realidad la supervisión en tiempo real de las flotas.
Entre los recursos de los fabricantes se incluyen las personas y los activos físicos que necesitan para producir, almacenar, vender, reparar, mantener y entregar sus productos. Las fábricas, los almacenes, la maquinaria y los vehículos (como camiones o tractores) son ejemplos de activos físicos. Antes incluso de que pueda iniciarse la optimización de la cadena de suministro, las empresas deben auditar todos estos recursos para asegurarse de que cuentan con las competencias, las tecnologías, los equipos y los procesos adecuados.
Para los consumidores, el "efecto Amazon" es la expectativa de que tendrán acceso a casi cualquier tipo de producto a un precio razonable y que lo reciban en el plazo de uno a dos días, o incluso el mismo día. Amazon.com ha establecido esas expectativas a través de una serie de innovaciones en la cadena de suministro que incluyen análisis de datos avanzados, robótica, su propia flota de camiones que complementa a los socios de logística externos a la empresa, soporte para vendedores asociados y una estrategia de distribución geográfica de almacenes que garantice que los pedidos se puedan retirar y enviar rápidamente desde ubicaciones cercanas a los clientes. La optimización de la cadena de suministro ya no se trata solo de lograr el menor costo posible. Los fabricantes deben ser capaces de satisfacer las exigencias de los clientes de plazos de entrega más cortos y un servicio más ajustable y reactivo, sin importar el tipo de producto que estén desarrollando.
La visibilidad integral de cada fase de la cadena de suministro es la principal prioridad en la optimización de la cadena de suministro. Los responsables de la cadena de suministro no pueden actuar sobre algo que no conocen.
El trabajo de un planificador de la cadena de suministro es alinear la producción, el almacenamiento y el transporte con la demanda del producto para garantizar que la cantidad correcta de inventario esté disponible en el momento adecuado. El exceso de producto disponible aumenta los costos de almacenamiento; la escasez corre el riesgo de decepcionar a los clientes y los distribuidores, que pueden acudir a otro lugar para satisfacer sus necesidades. Los planificadores de la cadena de suministro también desempeñan una función clave en la determinación de la ubicación de fábricas, almacenes y centros de distribución, todo ello alineado con los datos sobre la disponibilidad de materias primas y la ubicación de los clientes. Las capacidades de planificación del software de SCM moderno, a menudo combinadas con datos de terceros, como informes meteorológicos o cambios normativos, permiten a los planificadores predecir la demanda y las restricciones y las interrupciones del suministro, así como priorizar y reprogramar órdenes abiertas basadas en niveles de inventario en tiempo real.
Las empresas recurren a fabricantes contratados para reducir los costos y penetrar en nuevos mercados geográficos, entregando parte o la totalidad de su producción a especialistas nacionales o extranjeros. Los fabricantes a menudo eligen ubicaciones que permiten un envío rápido a los centros de entrega y, en última instancia, a los clientes. La fabricación subcontratada también ayuda a las empresas a ampliar y reducir su capacidad según lo dicte la demanda, convirtiendo los costos fijos en variables y liberando flujo de caja. Además, la fabricación por contrato permite a las empresas centrarse en las principales partes de su negocio, como el diseño y la ingeniería de productos, en las que tienen una ventaja competitiva. Los fabricantes también subcontratan partes de sus negocios no dedicadas a la producción, como logística, compras y atención al cliente, por muchas de las mismas razones.
El uso de proveedores de logística de terceros (3PL) es otro modelo de subcontratación habitual. Los proveedores de 3PL se especializan en operaciones de cadena de suministro, almacenamiento y servicios de logística que se pueden ampliar o reducir en función de las necesidades del fabricante. Los fabricantes utilizan un software de gestión de inventario diseñado para comunicarse con el de gestión de almacenes de un proveedor de 3PL para admitir numerosas tareas, incluidas las recepciones de órdenes de compra, las devoluciones a proveedores, las transferencias de inventario y los envíos de pedidos. A medida que crece la demanda de envíos más rápidos, mantener relaciones con proveedores de 3PL en regiones específicas puede ayudar a los fabricantes a afrontar los desafíos de entrega al cliente a un costo menor.
La conexión de los socios de la cadena de suministro, principalmente fabricantes, proveedores, distribuidores y minoristas, es crucial para tomar decisiones informadas y oportunas cuando se producen interrupciones de la cadena de suministro y fluctuaciones en la demanda. La única forma de crear esas conexiones pasa por que todos los miembros de la cadena de suministro utilicen sistemas integrados para compartir información en tiempo real, sobre todo para las complejas redes de proveedores y retailers con múltiples participantes en diferentes geografías.
La mejora de la colaboración entre proveedores y empresas del sector retail puede tener un impacto tangible en la satisfacción del cliente, por ejemplo, al garantizar que los retailers dispongan de los productos que necesitan en un momento determinado o puedan informar a los clientes sobre posibles retrasos. Los fabricantes que se esfuercen por establecer relaciones más sólidas pueden convertirse en socios confiables y, por lo tanto, obtener un mejor acceso a las materias primas y al espacio de almacenamiento de los retailers y, a su vez, estos podrían mejorar su acceso a productos de elevada demanda. A medida que los fabricantes obtienen más información sobre los clientes de los retailers, pueden ajustar sus previsiones de demanda para gestionar mejor sus niveles de inventario.
Una de las mejores formas de mejorar la eficiencia de la cadena de suministro es automatizar las tareas rutinarias, ya que permite liberar a los empleados para que se centren en tareas de mayor nivel. Por ejemplo, los fabricantes pueden automatizar el reaprovisionamiento de materias primas para solicitar automáticamente más unidades cuando los suministros alcancen un umbral determinado y para actualizar a los clientes en cuanto al estado de entrega. Aparte de la automatización, los fabricantes están empezando a beneficiarse de herramientas avanzadas como el modelamiento de escenarios, el diseño de redes logísticas y la robótica. Una investigación realizada por Ernst & Young señala que para 2035 se espera que el 45 % de las cadenas de suministro sean en gran medida autónomas, ya que utilizarán tecnologías como la robótica, los vehículos autónomos para la fabricación y entrega y la planificación automatizada. La IA también desempeñará una función más importante en cada fase de la cadena de suministro, impulsando la toma de decisiones predictivas. En una encuesta realizada por KPMG en 2022, seis de cada diez encuestados planean invertir en tecnologías digitales para mejorar sus procesos de cadena de suministro, sintetizar datos e impulsar sus capacidades analíticas.
Los consumidores esperan poder comprar productos a través de múltiples canales: en tiendas, a través de sus dispositivos móviles o informáticos, en mercados en línea como Amazon o incluso a través de sus cuentas de redes sociales, como Instagram o Facebook. Los fabricantes que establecen múltiples canales de ventas se benefician de la diversificación de su base de clientes y de su mayor exposición. Sin embargo, el mayor beneficio es el aumento de los niveles de satisfacción del cliente. Un informe de BRP Consulting de 2019 señala que el 56 % de los consumidores tienen más probabilidades de comprar en una empresa que ofrezca una experiencia que permite "empezar y terminar en cualquier punto".
En términos de ejecución de pedidos, los fabricantes deben redoblar la atención para equilibrar las expectativas de los clientes y la rentabilidad mediante la optimización de la gestión de órdenes. Al principio era una tarea que precisaba mucha mano de obra, ya que los trabajadores debían revisar los registros de inventario e identificar la opción más cercana para ejecutar el pedido. No obstante, los fabricantes ahora usan software de gestión de órdenes que permite a los trabajadores administrar por excepción mediante la evaluación de todos los canales y fuentes de suministro para determinar cómo completar una orden de forma rápida y económica. Los fabricantes deben invertir en herramientas que centralicen la gestión de pedidos, combinen órdenes de múltiples canales y realicen el seguimiento de las devoluciones de productos.
Todas las condiciones de una relación fabricante-proveedor son negociables y renegociables, incluidos los precios, los plazos de entrega, la calidad del producto (entrega sin daños), la tasa de cumplimiento (SKU enviados con éxito en el primer intento), la capacidad de respuesta a las condiciones del acuerdo de nivel de servicio y la confiabilidad (que los proveedores exhiben con sólidas prácticas de comunicación y con el constante cumplimiento de las expectativas). Cuando, pasado el tiempo, se forja una colaboración de confianza, una de las áreas clave que se deben renegociar son las condiciones de las cuentas por pagar. Por ejemplo, los proveedores pueden extender las fechas de vencimiento de los pagos, lo que supone un gran beneficio para los fabricantes que pueden estar esperando a vender el inventario. También se pueden negociar descuentos por pronto pago, los cuales resultan muy positivos tanto para los proveedores como para los fabricantes.
Los fabricantes no dejan de ajustar sus cadenas de suministro con la vista puesta en generar ahorros de costos y perfeccionar sus procesos. La dificultad radica en identificar los ajustes que lograrán generar una transformación tangible.
Para ello, los responsables de la cadena de suministro confían en los KPI que miden la eficiencia con la que pueden adquirir materias primas, convertirlas en productos terminados y entregarlos a los clientes. Un KPI financiero es el tiempo del ciclo de conversión de efectivo, que mide el tiempo que transcurre entre la fecha en que se paga a un proveedor por los materiales y el momento en que se recibe el pago de un cliente. Los KPI de atención al cliente incluyen entrega a tiempo, entrega sin daños y tasa de cumplimiento, que mide el porcentaje de pedidos de clientes que se completan en el primer envío. Es importante que los fabricantes comparen sus KPI con los resultados estándar del sector. Los grupos industriales y las empresas de analistas pueden proporcionar puntos de referencia específicos de la fabricación; los bancos pueden proporcionar puntos de referencia financieros.
Justo antes de que la pandemia de la COVID obligara a algunos de sus trabajadores a trabajar desde casa, Cohu, un fabricante de equipos de prueba e inspección de semiconductores, completó su implementación de aplicaciones de cadena de suministro, ventas y finanzas de Oracle Cloud. Los beneficios fueron inmediatos: la introducción de un único sistema de cadena de suministro, por ejemplo, permitió a los gerentes de producción de Malasia simplificar el manejo de órdenes de cambio de ingeniería, que anteriormente provenían de áreas separadas del negocio utilizando diferentes procesos y flujos de trabajo. A medida que Cohu extiende su sistema SCM a sus proveedores, podrá captar información precisa de los componentes en fases más tempranas del proceso, evitando así problemas de calidad y engorrosas devoluciones de proveedores.
La optimización de la cadena de suministro, es decir, hacerla más eficiente, rentable y amable para los socios, no es un objetivo estático que se pueda dar por conseguido. Los responsables de la cadena de suministro siempre deben evaluar nuevas tecnologías y procesos. Los cambios en la economía, las condiciones del mercado y las expectativas de los clientes requerirán nuevas tecnologías y procesos y ajustar los existentes.
Las suites integradas de aplicaciones alojadas en la nube de Oracle para la gestión de la cadena de suministro, la fabricación, la planificación de recursos empresariales (ERP) y la gestión del rendimiento empresarial pueden ayudar a los fabricantes a impulsar la eficiencia en todas las esferas de su negocio. Las aplicaciones de SCM supervisan y responden rápidamente a las interrupciones de la cadena de suministro, por ejemplo, y las aplicaciones de ERP mejoran la visibilidad de que disponen los fabricantes de los procesos financieros y su capacidad para gestionar los riesgos. Dado que las aplicaciones están alojadas en la nube, los fabricantes pueden desplegarlas a su propio ritmo y agregar nuevas funciones, como la supervisión de la producción con el IoT, las herramientas de gestión del ciclo de vida de los productos y la logística de transporte avanzada, según sea necesario.
¿Cuánto tiempo se tarda en desarrollar una estrategia de cadena de suministro?
La cantidad de tiempo que se tarda en desarrollar una estrategia depende de la complejidad de la cadena de suministro, el sector, el tamaño del negocio y los tipos de tecnologías y procesos que la empresa ya utiliza para gestionar su cadena de suministro. En general, esta planificación puede tardar hasta seis meses si la cadena es pequeña y sencilla y hasta tres años o más en las grandes y complejas.
¿Cuánto tiempo se dedica a la gestión de la cadena de suministro?
La gestión de la cadena de suministro no tiene ni principio ni fin, es un proceso continuo que requiere supervisión y ajustes constantes y un sólido enfoque en las capacidades de los proveedores del fabricante y las necesidades de sus clientes.
¿Qué es un plan de optimización de la cadena de suministro y cuáles son sus características?
Un plan de optimización de la cadena de suministro describe las estrategias involucradas en la mejora de la eficiencia y la rentabilidad de la cadena de suministro de una empresa. Detalla las tácticas que se deben ejecutar para lograr los objetivos de la cadena de suministro de una empresa, que se miden con indicadores clave de rendimiento, como la entrega a tiempo, la tasa de entrega de pedidos perfecta y el costo de transporte del inventario.